Los Beneficios de la Conectividad de Dispositivos Médicos

21 de septiembre de 2020

Cada vez son más, hospitales y centros clínicos, los que apuestan por renovar sus dispositivos de diagnóstico tradicionales por otros con tecnología digital. Estos, como los EMR o registros electrónicos médicos, permiten una mejora tanto en los planes de tratamiento, gestión de datos y resultados clínicos de los pacientes.

Veamos algunos de los numerosos beneficios de utilizar dispositivos médicos conectados

Mejor diagnóstico, mejor tratamiento
Los dispositivos médicos conectados, como los que podemos llevar puestos (Fitbit, smartwatch, camisetas inteligentes) y otros que pueden utilizarse en el hogar del paciente a través de dispositivos inteligentes, se utilizan ya para recoger una variedad de información sobre la salud. No solo son menos intrusivos y más cómodos de usar, sino que pueden reunir datos sobre el entorno, la nutrición y los aspectos vitales de un modo más eficiente.

Cuando se combinan con datos clínicos de procedimientos médicos o pruebas de laboratorio, los dispositivos médicos conectados ayudan a los profesionales a configurar un cuadro más completo de la salud del paciente. Esta perspectiva, más global, les permite tomar decisiones de diagnóstico o tratamiento más precisas y mejor documentadas.

Una vez elegido el tratamiento, los dispositivos médicos conectados fomentan mejores resultados en los pacientes mediante un seguimiento continuo. ¿Cómo funciona el tratamiento? ¿Está mejorando el paciente? ¿Empeora? Los dispositivos conectados aclaran las respuestas a estas preguntas y alertan a los médicos mucho más rápido que los métodos tradicionales.

Con la tecnología del Big Data, toda la información recogida puede ser analizada sistemáticamente. Esto le da al personal médico la capacidad de identificar las tendencias o similitudes que podrían mejorar un tratamiento.

Monitorización remota de enfermedades crónicas
Las enfermedades crónicas como algunas patologías cardiacas o la diabetes afectan a muchas personas. Por lo general, los pacientes con estas condiciones deben visitar al médico frecuentemente. Pero hacerlo se complica cuando por ejemplo cuando el paciente reside en zonas alejadas de su centro médico de referencia.

Los dispositivos médicos conectados están solventando este problema a través de la monitorización remota. Así, independientemente de donde resida el paciente, su médico puede seguir evaluando la evolución de su salud y comprobar que tanto el tratamiento como los signos vitales sean correctos, aportando más tranquilidad al paciente.

El seguimiento de pacientes a distancia, también permite a los médicos realizar una intervención de urgencia en caso de que surja un problema, lo que constituye un paso fundamental para reducir los riesgos. Además del seguimiento activo, muchos dispositivos conectados también pueden realizar diagnósticos, lo que permite a los médicos personalizar los tratamientos con mayor precisión.

Todo esto se suma a un enfoque mucho más global de la atención sanitaria. Y hasta ahora, los resultados han sido prometedores: un estudio reciente encontró que la monitorización remota de pacientes redujo la mortalidad por diversas causas en un 20%.

Flujo de trabajo mejorado = Experiencia mejorada
La simplificación del flujo de trabajo es imprescindible para obtener resultados más eficientes. Con el acceso remoto a los datos, los dispositivos conectados facilitan la recopilación y centralización de la información para su análisis.

Por lo general, se pierde mucho tiempo transcribiendo datos de un sistema a otro. Al poder acceder e intercambiar datos de diferentes EMR, los médicos pueden obtener los datos que necesitan en el formato que mejor les convenga.

A su vez, esto promueve un enfoque más personalizado de la experiencia del paciente. Los dispositivos conectados permiten que la información sea transmitida a los pacientes de una manera más personalizada. También pueden supervisar el cumplimiento de los tratamientos y terapias sugeridos.

Mejora de la gestión de activos
El uso y mantenimiento de los dispositivos médicos solía ser una tarea ardua e ineficiente. Si surgía un problema, normalmente no se abordaba ni se solucionaba hasta un uso posterior.

Los dispositivos médicos conectados permiten completar y reunir diagnósticos de dispositivos a distancia. Esto permite garantizar que cada dispositivo funciona de forma segura. Incluso se pueden configurar alertas de mal funcionamiento para poder tomar medidas antes de cualquier incidente adverso.

Este acceso a la información en tiempo real también permite a los desarrolladores de MedTech optimizar mejor el trabajo de mantenimiento. También simplifica las actualizaciones de software y la corrección de errores. Al igual que muchos otros dispositivos digitales, la resolución de problemas puede completarse al instante, de manera virtual, en lugar de esperar a un técnico.

Más datos = más soluciones
Otro de los beneficios de los dispositivos médicos conectados es el flujo de retroalimentación que generan. Con todos los datos recopilados, organizados y centralizados, los desarrolladores de MedTech pueden extraerlos para comprender mejor cómo se utilizan estos dispositivos.

A su vez, esto puede alimentar la nueva iteración del dispositivo y darle una verdadera ventaja competitiva sobre otros que no aprovechen el poder de los datos. Esto podría dar lugar a nuevas capacidades de diagnóstico y planes de tratamiento.

Como señala Frederic Llordachs, cofundador de Doctoralia, este nuevo concepto de MedTech es: “el traslado de la tecnología fuera de los recintos sanitarios para que ésta sea usada por la sociedad en general”. “Se trata de dar herramientas para que el paciente sea amo de su propia patología”.

Es una situación en la que todos ganan. La tecnología MedTech ayuda a los pacientes y a los médicos a alcanzar mejores resultados.

Conectando a un futuro más saludable
Los dispositivos médicos conectados ya están proporcionando mejores experiencias y resultados para los pacientes a un coste menor. Pero esto es solo el comienzo.

Los fabricantes de dispositivos y los centros sanitarios están empezando a aprovechar el verdadero potencial de todos los datos que tienen ante ellos. Y sin duda nos ayudará a mejorar nuestros protocolos de atención médica de una manera sin precedentes.

¿Qué dispositivos médicos conectados usaremos en un futuro próximo? Déjanos tus comentarios.

¿Listo para empezar a usar OK Doctor?