Apple ha ido más allá de su visión original de muchas maneras a lo largo de los años. Una de sus incursiones en sectores ajenos más significativa es su entrada en el ámbito sanitario.
Tim Cook compartió recientemente que creía que esta incursión sería la “mayor contribución de su compañía a la humanidad”. Lo cierto es que, el hecho de que Apple se haya atrevido a dar este paso puede ser lo que necesita la compañía para recuperar el carácter innovador y revolucionario que una vez tuvo.
La sanidad es clave para una nueva etapa de innovación tecnológica
El reciente interés de Apple por la salud está dando lugar a una competencia mucho mayor en el mercado de los wearables en el ámbito sanitario. Fitbit se asoció hace poco con Bristol-Myers Squibb-Pzifer Alliance para desarrollar una forma de detectar arritmias en un intento de competir con el Apple Watch.
La competitividad en el sector sanitario traerá interesantes innovaciones
Apple trata de recuperar la creatividad y la personalidad disruptiva por la que eran conocidos durante la etapa de Steve Jobs. Sin embargo, la mayoría de sus proyectos no destacan tanto como antes. Aunque continúan siendo el mismo gigante tecnológico con numerosos proyectos en desarrollo, el factor innovación no se encuentra en su mejor momento. El hecho de que Apple sea una empresa que cotiza en bolsa influye, hasta cierto punto, en el poco margen que tienen para asumir riesgos en cuanto a sus proyectos.
De la misma forma que otras empresas del sector, la innovación en Apple se convierte en una tarea realmente complicada cuando tienes que mostrar a los accionistas un flujo de ingresos creciente y un aumento continuo de los beneficios.
Los objetivos a largo plazo quedan a la sombra del crecimiento inmediato
La necesidad de obtener resultados a corto plazo hace que las ideas disruptivas y creativas se dejen a un lado. A pesar de que Apple también ha caído en este dilema, su incorporación al sector sanitario parece indicar que la innovación característica de la etapa de Jobs puede volver a tener un lugar.
Cómo la tecnología está transformando la sanidad
Conforme envejece la generación del baby boom, nuestra sociedad dependerá cada vez más de soluciones sanitarias de alta tecnología. Las personas viven más tiempo que nunca y no hay suficientes cuidadores, médicos, enfermeros y centros especializados para atender a la población que envejece.
Además, a muchas personas mayores no les resulta tractiva la idea de trasladarse a residencias para la tercera edad o depender de otras personas para que les cuiden. Prefieren envejecer y pasar sus días en casa. Ahora más que nunca, la tecnología les permite cumplir ese deseo. Gracias a las herramientas de control sanitario a distancia, los dispositivos portátiles, wearables y la telemedicina, la idea de “envejecer en casa” es cada vez más posible.
Imagínate que tienes 70 u 80 años y tienes una máquina de presión arterial y una báscula inteligente que envía todos tus datos de salud en tiempo real a la nube. Una IA rastrearía esos datos al momento para determinar si tus registros se encuentran dentro de lo correcto. En el momento en el que detectase cualquier problema, se te avisaría para ir al hospital y recibir atención preventiva lo antes posible.
Un cambio de paradigma en el cuidado de la salud
Hasta el día de hoy, nuestro sistema sanitario se ha enfocado en proporcionar una atención reactiva. Los hospitales, médicos, compañías de seguros y las instituciones han priorizado el tratamiento de las patologías y dolencias. Es decir, los problemas de salud se tratan cuando se manifiestan en lugar de prevenirlos antes de que se conviertan en un problema más serio.
Una tendencia hacia la prevención
Este cambio de paradigma entre profesionales y organizaciones para centrarse en la prevención está siendo reforzado por las empresas incipientes que ofrecen dispositivos disruptivos, soluciones online, tecnología móvil y muchas más opciones para una atención sanitaria fluida, personalizada y eficiente. Uno de los mejores ejemplos es como en unos pocos años hemos conseguido trasladar los historiales médicos “físicos” en papel a la nube.
Actualmente, los historiales de los pacientes se almacenan de forma segura, es posible acceder a ellos fácilmente, se actualizan en el momento que sea necesario y se comparten entre los especialistas instantáneamente. Todos estos datos indican que vamos evolucionando constantemente hacia mejores experiencias y resultados para los pacientes.
Soluciones que deben plantearse desde ya
Desde luego, falta de problemáticas que resolver no habrá en el sector: envejecimiento de la población, reducción de cuidadores, incremento de costes y de demanda… A medida que se acelera esta transformación en la sanidad, aumenta la oportunidad de la tecnología para formar parte de esa transformación.
La creciente necesidad de tecnología disruptiva en el sector sanitario hace que volver a la creatividad de la etapa de Steve Jobs sea más necesario que nunca. Aunque todo queda en manos de las empresas tecnológicas, que deben estar a la altura del increíble reto que tenemos ante nosotros.
¿Qué tecnologías de medicina preventiva veis más necesarias? ¡Leemos vuestras propuestas en comentarios!