Actualmente, estamos interconectados con una tecnología que nos ayuda, nos facilita nuestra cotidianidad, nos guía cuando estamos perdidos, nos cuida y así nos sentimos más seguros y más alegres. Cuando esta tecnología se aplica a la medicina es un elemento crítico que impacta en la calidad asistencial, la rapidez de diagnóstico….
La revolución tecnológica avanza a pasos agigantados y el sistema nacional de salud corre el riesgo de quedarse atrás con mucha facilidad. Desde principios de 2019, la solución tecnológica de moda es la Inteligencia Artificial. Aun con más carencias que resultados, es incuestionable que su contribución al sistema sanitario va a ser muy importante en el futuro, como complemento a la labor de los profesionales sanitarios.
La IA, será siempre un aliado del médico, no su sustituto. Una herramienta que simplifica su día a día, acelerando la clasificación o búsqueda de historiales, acelerando el proceso de diagnóstico y la detección precoz de algunas patologías. Pero ¿Está preparado el sistema sanitario español para implantar esta tecnología?
Según los datos del último informe de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (FENIN), la respuesta es no. Aún estamos muy lejos de otros países en cuanto a investigación e implantación de tecnologías aplicadas a la sanidad. La razón principal de este desajuste es el problema presupuestario crónico de la sanidad pública española. Por ejemplo, las empresas de productos tecnológicos sanitarios de nuestro país acumulan un 23% de la deuda pública de las comunidades autónomas, lo que limita la implantación de tecnologías de la información en nuestro sistema sanitario, ya que las empresas tecnológicas especializadas, no van a implantar desarrollos innovadores sino adaptaciones de soluciones tecnológicas cuya inversión en I+D ya esté amortizada. Consecuencia del alto riesgo de impago.
Otro problema importante es la falta de profesionales cualificados en las clínicas y hospitales, perfiles no médicos que deben trabajar mano a mano con los médicos para desarrollar y utilizar las tecnologías en su día a día
En lo que respecta a la sanidad privada, aunque parte con un nivel de digitalización y de implantación TIC más elevado que la sanidad pública, su capacidad de inversión es mucho menor, lo que limita la implantación y desarrollo de soluciones tecnológicas tan complejas como una IA.
Pese a todo, se están dando pasos en la buena dirección, como es el uso de aplicaciones basadas en Big Data. Su implantación no es tan compleja como la de las IAs y, proporciona una gran ayuda a la hora de poder manejar gran cantidad de información y analizar patrones, como el tipo de actividad física o laboral, la nutrición e incluso entorno ambiental-regional. Un ejemplo de ello, es un proyecto conjunto entre el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC) y Quirón Prevención, para elaborar un estudio que permita avanzar en la mejora de la salud cardiovascular de la población, al tiempo que se investigan los riesgos y patologías asociadas a ella. Este estudio y los últimos avances producidos en el campo de las investigaciones biomédicas cuentan con un denominador común: el uso de la tecnología.
Desde OK Doctor pensamos que este es el camino para evolucionar y mejorar la medicina, siempre que se facilite su accesibilidad y garanticen la confidencialidad de los datos de los pacientes, otro temor a sumar, para que la IA o el Big Data sean del todo aceptados. Pero debemos centrarnos en buscar soluciones para estos problemas.
La idea de tener unos planes claros y precisos de actuación, la formación de equipos multidisciplinares, mejorar la comunicación entre comunidades autónomas, la incorporación de empresas privadas para la elaboración y realización de proyectos concretos, siempre en beneficio del paciente, son ejemplos que proponemos para mejorar la situación de la sanidad española antes de acometer la inversión en nuevas tecnologías complejas como la IA.
¿Qué aportaciones propones para que nuestro sistema sanitario avance en la mejora e implantación de nuevas tecnologías?