Cuando los pacientes piensan en los profesionales sanitarios, tienden a asociarlos a personas afectivas, amables y preocupadas por su salud y bienestar. Sin embargo, pertenecer al sector sanitario no significa que tengas solo un buen corazón.
Ya seas un médico u odontólogo que trabaja en una o varias clínicas privadas, existen ciertas habilidades, rasgos y cualidades que poseen todos los grandes profesionales de la salud. En esta entrada de blog hemos recopilado 6 habilidades sociales características de un médico y un odontólogo.
1. Pasión por el trabajo
En primer lugar, para dedicarte a la medicina, a la odontología o a cualquiera de sus ramas es realmente importante que te apasione, que sientas vocación por lo que haces. Al final del día, no es solo un trabajo, es un compromiso de ayudar a los demás. Esta profesión puede ser exigente y desafiante y al mismo tiempo gratificante, por lo que debes amar realmente lo que haces. Se trata de tener la actitud correcta y levantarte cada día, emocionado por lo que se avecina, sabiendo que tus actos ya sea grandes o pequeños dejarán huella.
2. Buenas habilidades de comunicación
Los buenos profesionales de la salud deben comunicarse de manera eficaz. No debes obsesionarte con apuntar todos los datos del paciente en el ordenador. Todos los días estás tratando con personas. Por lo tanto, debes escuchar a los pacientes y a sus familiares, comprender sus necesidades y poder explicar lo que les sucede y qué tratamiento necesita de una manera que tenga sentido para que se sientan valorados y apoyados.
3. Capacidad para realizar múltiples tareas
Trabajando en el sector sanitario es posible que te encuentres en la situación de atender a varios pacientes al mismo tiempo. Si trabajas a comisión, como médico u odontólogo, en clínicas privadas, por ejemplo, un día típico puede ser evaluar la salud de varios pacientes, comunicarte con los compañeros sobre su progreso y mantenerte al día con su historial clínico. Por lo tanto, un buen profesional debe tener la capacidad de realizar múltiples tareas. Para registrar los actos en consulta, muchos médicos y odontólogos cuentan con la aplicación OK Doctor. A final de mes, la aplicación OK Doctor te permite comprobar lo que has trabajado con los honorarios que te paga la clínica. Si no te han pagado algún acto, puedes generar una reclamación a la clínica
4. En forma y activo
Es prácticamente un hecho si trabajas en una o varios centros privados, que estarás de pie la mayor parte del día. También es posible que a veces debas ayudar a los pacientes a moverse. Por eso, es importante estar en buena forma física para poder mantenerte al día con la naturaleza acelerada del trabajo, especialmente si estás trabajando en diferentes clínicas privadas o centros de salud.
5. Buenas habilidades para resolver problemas
Cada día en la clínica o centro de salud privado es diferente. Siempre hay un nuevo desafío o problema que resolver, a menudo en muy poco tiempo. Por lo tanto, debes pensar con rapidez. Un buen médico u odontólogo tiene que resolver un problema de manera tranquila y racional y llegar a una solución con la que todos (y lo más importante, tu paciente) estén contentos.
6. Empatía y comprensión
Por encima de todo, un buen profesional sanitario debe mostrar empatía hacia los pacientes y ofrecerles consuelo cuando lo necesiten. A veces, los pacientes pueden encontrarse en situaciones difíciles o frustrantes y necesitan a alguien que los escuche, que los comprenda y respete su punto de vista. Si respondes amablemente, con empatía y comprensión, tendrás un impacto positivo en tu paciente y seguro que se acordará de ti en la próxima visita.